Los vasos sanguíneos son los encargados de transportar el oxígeno, los nutrientes y la defensa en el cuerpo humano, además son responsables del drenaje de los desechos, esta última función es dada principalmente por las venas y los vasos linfáticos.
Una de las alteraciones frecuentes en los vasos es el Hemangioma, el cual se describe como una malformación benigna de dichos vasos, dichos vasos multiplican su aparición, estos vasos anormales frecuentan en la piel o en órganos más internos.
Constituye menos de un 10% de las neoplasias benignas, y se localiza principalmente en la cabeza y cuero cabelludo, es más frecuente en niñas, pueden ser planos o elevados.
Puede ser Capilar (Formado por vasos capilares, es frecuente en lactantes y desaparece, con frecuencia puede durar años) y también Cavernoso (Se ve en la infancia y puede persistir, también puede involucrar otras capas y órganos más profundos).
A continuación, la imagen de un Hemangioma Cavernoso, capturada por el lente de mi BlackBerry, mientras tenía mi rotación de Emergencia pediátrica en el Hospital Robert Reíd.
Muy interesante, no había visto ni escuchado antes sobre la Hemangioma.
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